Este es un pequeño glosario de artes gráficas y materias relacionadas con ellas (óptica, periodismo, tipografía, etc…). Además de un listado alfabético y de un formulario de búsqueda, se incluye un índice temático por áreas grupos de interés (PDF, Óptica, Tipografía, Preimpresión, etc…). En la medida de lo posible, se indica el equivalente en inglés, francés, italiano, alemán, catalán y portugués del término descrito.
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Al hablar de imágenes o ilustraciones "a toda página", éstas se pueden colocar a caja o "a sangre" (hasta lor bordes de las páginas). Todos los tipos de impresión permiten el diseño "a caja" pero no todos permiten el diseño "a sangre".
Las partes de una publicación a doble página abierta.
En una publicación de dos o más hojas, la zona donde se pliega el papel. A veces, por extensión, el margen interior entre el texto o imágenes y el medianil en si.
Es un elemento que hay que tener en cuenta al componer una doble página ya que es una barrera visual que no se debe ignorar. Colocar elementos sin tenerlo en cuenta es un error básico en diseño gráfico.
La composición y color de la tinta es muy variable. Así, las tintas para litografía artística son muy viscosas y espesas, mientras que las tinta para dibujo a pluma o para grabado mediante huecograbado son bastante fluidas y líquidas. Algunas, como las tintas de serigrafía son opacas como la pintura, pero la mayoría son semitransparentes al aplicarse.
En colorimetría, cualquiera de tres colores espectrales que, combinados entre si en distintas proporciones, se usa para crear una sensación de color.
Al contrario de lo que se creía hasta entonces, los experimentos de Wright y Guild a finales de los años veinte del siglo XX, demostraron que no existen tres primarios reales que combinados puedan dar lugar a todos los colores perceptibles por ser humano medio.
Los tres primarios aditivos clásicos: Azul, verde y rojo.
Por eso, al desarrollar el primer modelo matemático que describe las sensaciones de color humana (un espacio de color llamado espacio de color CIE XYZ, de 1931), se usaron lo que se conocen como "primarios imaginarios", que son abstracciones matemáticas derivadas de datos reales y que sí permiten definir todas las sensaciones de color posibles.
Para desarrollarlos se usaron como base tres colores primarios espectrales con las longitudes de onda de 435,8 nm. (azul), 546,1 nm. (verde) y 700 nm. (rojo), que son tres primarios reales que, al combinarse, permiten una amplia creación de tonos perceptibles.
En sentido más general y menos específico, un primario es uno de los tres colores básicos que, combinados en distintas cantidades, se usan para formar otros tonos.
Los tres primarios aditivos y los tres sustractivos.
Conforme se siga un modelo de formación del color aditivo o sustractivo, se suelen usar tres primarios aditivos (rojo, verde y azul) o tres primarios sustractivos (Cian, Magenta y Amarillo).
Una rueda de colores.
Este conjunto de colores primarios opuestos se pueden distribuir a lo largo del espectro luminoso y, si éste se dibuja como si fuera un círculo cuyo comienzo y final se encuentra, se dibuja una rueda de colores en la que cada triada de primarios forma un triángulo, como se ve en la imagen superior.
Cuando se mezclan los primarios aditivos, se producen los primarios sustractivos, y viceversa.
Los colores que se forman de combinar dos primarios son colores secundarios. Por eso en la teoría de los colores, los colores primarios aditivos son los colores sustractivos secundarios y los colores primarios sustractivos son los secundarios aditivos (o sea: Que cada primario sustractivo tiene un oponente aditivo y viceversa).
Los tres colores primarios clásicos en pintura. Son pigmentos.
En la tradición pictórica, los colores primarios son azul, rojo y amarillo. Esto se debe a que son los tres colores que con los pigmentos y colorantes más tradicionales —anteriores al descubrimiento de colorantes como el magenta— permiten una amplia formación de tonos nuevos, aunque haya que combinarlos con blanco y negro.
Uno de los primeros procedimientos fotográficos, aparecido a mediados del silo XIX. Su principal ventaja era que permitía obtener varias copias positivas de un mismo negativo. Sin embargo, las copias obtenidas no eran particularmente nítidas.