Este es un pequeño glosario de artes gráficas y materias relacionadas con ellas (óptica, periodismo, tipografía, etc…). Además de un listado alfabético y de un formulario de búsqueda, se incluye un índice temático por áreas grupos de interés (PDF, Óptica, Tipografía, Preimpresión, etc…). En la medida de lo posible, se indica el equivalente en inglés, francés, italiano, alemán, catalán y portugués del término descrito.
Aviso: Este glosario está en una actualización interna importante. Durante algún tiempo algunos enlaces podrían no funcionar adecuadamente. Gracias por la paciencia.
La cantidad de flujo luminoso que llega a una superficie por unidad de área. La unidad de medida en el Sistema Internacional es el lux (1 lux = 1 Lumen/m2).
Se diferencia de la luminancia en que esta es la cantidad de luz que pasa o se refleja por una zona concreta en una dirección dada (y se mide en candelas/m2).
La diferencia entre iluminancia y luminancia.
Asi, dos papeles de distinto color (blanco y negro) pueden tener la misma iluminancia (les llega la misma cantidad de luz pero tienen una luminancia muy distinta (el blanco deja pasar o rebota mucha más luz que el negro).
Inglés:Film, Lithographic film • Francés:Typon, Film • Italiano:Fotolito • Portugués:Fotolito • Catalán:Fotòlit
En la época química y electroquímica de la preimpresión (entre mediados y finales del siglo XX), para grabar las planchas de una imprenta era necesario crear antes unas copias intermedias en película fotográfica de alto contraste (llamada 'litográfica'). Cada fotolito correspondía a una plancha de color y allí donde hubiera variaciones de intensidad, la película llevaba una trama que reflejaba en sus variacionas los cambios de intensidad de tono.
Cada una de esas películas era un fotolito. Los distintos fotolitos se imponían en grandes planchas llamadas astralones. Cada uno de esos astralones impuestos se usaba a su vez como gran imagen para grabar (por exposición a la luz, se insolaban) las distintas planchas de la imprenta.
Pero, antes de crear las planchas, se sacaban unas pruebas por contacto de los astralones (los llamados ferros), que se plegaban y cortaban para asegurarse que la sucesión de páginas (es decir, la imposición), era correcta.
Aunque la grabación directa de planchas desde el ordenador (CTP) y las pruebas digitales están arrinconando a los fotolitos, aún existen imprentas y fotomecánicas que siguen empleándolos. En serigrafía artesanal de textiles siguen vigentes.
La esencia de trementina es uno de los derivados de la resina de coniferas (pinos, abetos, etc…). La trementina es la parte volatil de la resina, que se destila mediante calentamiento de aquella. Es un líquido amarillento, muy inflamable y con un olor muy penetrante y característico. Se usa tradicionalmente como disolvente en pinturas. Tiende a espesarse al contacto con el aire (por evaporación de sus partes más líquidas). También se la conoce como "aguarrás vegetal".
Cuando la trementina es oscura eso se debe a que es de baja calidad o a que es "vieja" y ha estado en contacto con el aire.
Material plano, usualmente impreso, en uno de cuyos lados se ha aplicado una fina capa de pegamento para que se pueda pegar a alguna superficie.
La capa de pegamento está protegida por alguna película de barniz o laminado que la protege a la espera de su aplicación. La película se despega fácilmente justo antes de pegar el impreso a la superficie final. El pegado se realiza por simple contacto y presión (que no suele ser mucha).
Los autoadhesivos, de los que existen dos clases, se usan especialmente para etiquetas o materiales publicitarios:
Para superficies: El pegamento va en el lado opuesto al impreso. La pegatina se adhiere encima de la superficie.
Para ventanas o cristales: El pegamento va en el mismo lado que el diseño. La pegatina se adhiere por detrás de un cristal o ventana, que lo protege y deja ver el diseño.
En ambos casos, existen las siguientes partes: Un papel o base con el diseño impreso mediante alguna tinta, una capa de pegamento, una capa de soporte (en inglés liner) y un laminado o barniz protector.
La idea es que las capas del laminado y el diseño (el papel con las tintas) forman la pegatina mientras que el soporte es una simple capa temporal que protege a la pegatina hasta que se va a pegar, entonces se retira y deja al descubierto la capa con el pegamento, que se pone en contacto con la superficie sobre la que va.
La pegatina puede ir troquelada a medio corte o a troquel completo para separarla del soporte.
Los materiales como los sellos tradicionales o las calcomanías, que necesitan humedad para pegarse, no se consideran autoadhesivos.