Términos al azar
Libro de bolsillo
Formato de libro de pequeño tamaño, realizado en papel de calidad mediana o baja y encuadernado en rústica (tapa blanda). Es un tipo de edición ideado para el consumo masivo, el uso rápido en cualquier lugar —se puede llevar en el bolsillo— y un coste bajo para el editor y el lector.

No existe un tamaño único para los libros de bolsillo, pero el formato más usual anda entre los 11 × 17 cm. y los 15 × 21 cm.; por ejemplo, los libros de la editorial Penguin tradicionales tienen 12,9 × 19,7 cm.
Aunque hubo precedentes, los libros de bolsillo nacieron verdaderamente en los años treinta del siglo XX y fueron uno de los grandes saltos industriales en la democratización de la cultura. El margen de beneficio que dejan al editor es menor que el de su correspondiente versión en tapa dura, pero permiten acceder a segmentos de clientes que, de otro modo, no comprarían ninguna de las versiones. Además, son una opción comercialmente menos arriesgada en el caso de autores y obras cuyo éxito está aún por comprobar.
Iluminante estandar CIE A
Uno de los iluminantes estándares propuestos por la CIE. El iluminante CIE A, definido en 1931, es un intento de describir la iluminación de una típica bombilla de filamento incandescente.

Como tal descripción, A es simplemente una tabla de energía relativa por en franjas de 10 en 10 nanómetros de los 300 a los 830 nanómetros.
Su temperatura de color media es de 2.856 Kelvin. Cualquier fuente luminosa cuya curva de distribución espectral se corresponda suficientemente con los datos del iluminante CIE A se considera una fuente A, y la luz que emite se homologa como A.
Su uso está indicado para aquellas situaciones en las que la iluminación sea mediante bombillas de filamento incandescente o fuentes luminosas cuya distribución espectral sea suficientemente similar.
Compás

Dispositivo de dibujo técnico que se usaba para dibujar círculos con gran precisión antes de la llegada de los ordenadores.
Dicromacía
Percepción visual que sólo emplea dos tipos de conos. En muchos animales es la forma usual de visión. En los humanos es una forma de ceguera al color (más precisamente llamada dicromatopsia) causada por la ausencia o funcionamiento disminuido de uno de los tres tipos de conos. Se divide en protanopía, deuteranopía y tritanopía.