Términos al azar



Ángulo de observación

Inglés: Angle of observation • Francés: Angle d'observation • Italiano: Angolo di osservazione • Portugués: Ângulo de observação

El ángulo formado entre el plano de los ojos de un observador y el plano formado por lo observado. Si la posición del observador es pefectamente perpendicular (90º) con respecto al plano de lo observado, el ángulo de observación es cero, ya que realmente el ángulo de observación se mide con respecto a la línea que sale perpendicularmende del plano de los ojos del observador, que se llama "línea de observación" o "línea de mira".

Los ángulos de observación.
Dos tipos de ángulos de observación: En línea y un poco desde arriba.

Al tratarse de planos bidimensionales, los ángulos de observación son realmente dos: Uno por cada eje; por ejemplo: un observador puede estar perfectamente alineado horizontalmente —es decir, no estar desviado hacia la izquierda o la derecha—, pero formar un ángulo de 45º verticalmente —es decir, estar situado algo por encima de lo observado.

El concepto de "ángulo de observación" suele relacionarse con el "ángulo de iluminación".

Categorías: Óptica , Visión .

Mono

Inglés: Dummy, Mockup • Portugués: Boneco
  1. Un diagrama, boceto o modelo (a escala o reducido) para mostrar al impresor o cliente cómo va a quedar el impreso final o cómo deben de ser algunas de sus características (plegados, dobleces o similares, por ejemplo).
  2. En impresión de libros, un libro de papeles en blanco para mostrar cómo va a quedar la impresión final una vez encuadernada.

    Cuando se trata de materiales complejos (cajas para exposición o cosas así) se suele considerar obligatorio acompañar el material con un modelo o mono.

Categorías: Dibujo , Diseño gráfico .
Términos relacionados: Boceto , Monstruo .

Memoria del color

Inglés: Colour memory (GB), Color memory (EEUU)

La parte de la memoria visual humana destinada a recordar los estímulos de color o, dicho de otro modo, nuestra capacidad de recordar las sensaciones de color para reconocerlas cuando volvemos a percibirlas.

Los colores no se recuerdan como se percibieron sino de forma más simplificada.
Los colores concretos no se recuerdan como se percibieron sino de forma más simplificada (estas imágenes es un  ejemplo metafórica, no una descripción realista)

La memoria del color del ser humano es más bien pobre. De hecho, parece que siempre existe una alteración entre el color real cuando se percibe y la sensación de color que se recuerda como percibida; es decir: No recordamos los colores tal y como los vemos.

Obviamente, los fenómenos de la percepción afectan directamente a la forma en la que recordamos lo que percibimos. Tampoco hay que confundir nuestra capacidad de recordar colores concretos con la de distinguir entre colores distintos de forma simultánea —que es bastante buena— o de forma discontinua; es decir, en momentos o espacios distinto, no a la vez y bajo la misma iluminación —que es bastante peor—.

Los estudios indican que parece haber alteraciones sistemáticas y constantes en la luminosidad e intensidad del color percibido (es decir, el brillo), pero que esto se produce mucho menos en el recuerdo del tono.

Algunos teóricos han propuesto que la memoria tiende a exagerar los valores recordados, llevando a recordar colores más vivos y brillantes —¿evitando así valores medios quizás más difíciles de recordar?—. Además, parece que, como en otras cosas, tendemos a reducir los recuerdos de color en torno a un conjunto de modelos prototípicos, asociables a formas y objetos concretos (por ejemplo: Como sabemos que las fresas son rojas, si algo parece una fresa, tenderemos a recordarlo como rojo).

La memoria del color parece realizarse por zonas de colores, en torno a la decena, que nos sirven para centrar nuestros recuerdos cromáticos, por lo que tendemos hacia ellos al intentar recordar.

Es obvio que la precisión de nuestros recuerdos de color no desempeñó un papel importante en nuestra supervivencia como especie y que, una vez más, ha sido mucho más útil para la supervivencia la reducción del mundo real a un conjunto no evidente de modelos que el cerebro consigue manejar.

Tendemos a asociar el color con su expresión verbal. Los colores que no tienen una expresión clara en nuestro idioma, tienden a reajustarse a los más fácilmente descriptibles. Si un color está asociado con una forma natural, es fácil que el recuerdo se traslade al que tiene usualmente la forma asociada. El recuerdo de un color difícilmente encajable con estos estereotipos decae más fácilmente que aquellos que sí se adaptan. El recuerdo tiende a los colores modelo más cercanos. Ese es especialmente el caso en sensaciones de color que no agradan al observador.

No hay que confundir la memoria del color con el papel que desempeña el color en la memorización de objetos, formas y personas. Esa es otra función: la del color en la memorización.

Categorías: Color , Percepción .
Términos relacionados: Psicofísica .