Barniz fijador
Sustancia transparente que se usa en algunas técnicas de dibujo para fijar y proteger la obra. Se usa especialmente con dibujos al carboncillo. No todos los fijadores son iguales y no todos son barnices, aunque se llamen así.
Este es un pequeño glosario de artes gráficas y materias relacionadas con ellas (óptica, periodismo, tipografía, etc…). Además de un listado alfabético y de un formulario de búsqueda, se incluye un índice temático por áreas grupos de interés (PDF, Óptica, Tipografía, Preimpresión, etc…). En la medida de lo posible, se indica el equivalente en inglés, francés, italiano, alemán, catalán y portugués del término descrito.
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Gustavo Sánchez Muñoz (Gusgsm), 2025
Sustancia transparente que se usa en algunas técnicas de dibujo para fijar y proteger la obra. Se usa especialmente con dibujos al carboncillo. No todos los fijadores son iguales y no todos son barnices, aunque se llamen así.
En fotografía analógica, nombre que se da al fenómeno por el que se hacían evidentes las partículas que componen el material fotosensible original —la película, sea negativa o positiva—. Su nombre proviene de que las partículas se aprecian como diminutos granos de distintos tonos y colores.
El grano va en proporción a la sensibilidad y a la falta de luz en la exposición de la película: Cuanto más sensible es ésta y menos luz ha recibido, mayor es el grano apreciable, y viceversa. Por eso se suele decir que una película de alta sensibilidad "tiene mucho grano" y una de baja sensibilidad "tiene poco grano" o es "de grano fino".
Aunque en propiedad el grano es un defecto o limitación intrínsecos al material fotosensible analógico, los fotógrafos aprendieron a convivir con él, transformándolo en un recurso artístico.
El ruido en condiciones de baja iluminación es lo más cercano al grano que existe en la fotografía digital.
También, al hablar de papel, cartulina, cartón, madera o cualquier otro material compuesto de fibras longitudinales, "grano" es la dirección principal en la que se sitúan estas fibras.
Es un dato importante en la manipulación de este tipo de materiales porque se comportan mejor para plegados o hendidos en la dirección del grano pero son más resistentes a contragrano.
En el caso de la madera para xilografía o impresión tipográfica, es más fácil tallarla siguiendo el grano o veta de la madera.
La unidad básica de información. Un dato puede ser simple o complejo (estar formado por otros datos que se agrupan o acumulan).
Variante obsoleta de los estándares PDF/X creada en 1999 y sustituida hacia 2001 por PDF/X-1a.
Basada el el nivel 1.2 del formato PDF, esta versión PDF/X-1 nunca llegó a implantarse realmente, al contrario que las variantes PDF/X-1a.
La parte de la memoria visual humana destinada a recordar los estímulos de color o, dicho de otro modo, nuestra capacidad de recordar las sensaciones de color para reconocerlas cuando volvemos a percibirlas.
La memoria del color del ser humano es más bien pobre. De hecho, parece que siempre existe una alteración entre el color real cuando se percibe y la sensación de color que se recuerda como percibida; es decir: No recordamos los colores tal y como los vemos.
Obviamente, los fenómenos de la percepción afectan directamente a la forma en la que recordamos lo que percibimos. Tampoco hay que confundir nuestra capacidad de recordar colores concretos con la de distinguir entre colores distintos de forma simultánea —que es bastante buena— o de forma discontinua; es decir, en momentos o espacios distinto, no a la vez y bajo la misma iluminación —que es bastante peor—.
Los estudios indican que parece haber alteraciones sistemáticas y constantes en la luminosidad e intensidad del color percibido (es decir, el brillo), pero que esto se produce mucho menos en el recuerdo del tono.
Algunos teóricos han propuesto que la memoria tiende a exagerar los valores recordados, llevando a recordar colores más vivos y brillantes —¿evitando así valores medios quizás más difíciles de recordar?—. Además, parece que, como en otras cosas, tendemos a reducir los recuerdos de color en torno a un conjunto de modelos prototípicos, asociables a formas y objetos concretos (por ejemplo: Como sabemos que las fresas son rojas, si algo parece una fresa, tenderemos a recordarlo como rojo).
La memoria del color parece realizarse por zonas de colores, en torno a la decena, que nos sirven para centrar nuestros recuerdos cromáticos, por lo que tendemos hacia ellos al intentar recordar.
Es obvio que la precisión de nuestros recuerdos de color no desempeñó un papel importante en nuestra supervivencia como especie y que, una vez más, ha sido mucho más útil para la supervivencia la reducción del mundo real a un conjunto no evidente de modelos que el cerebro consigue manejar.
Tendemos a asociar el color con su expresión verbal. Los colores que no tienen una expresión clara en nuestro idioma, tienden a reajustarse a los más fácilmente descriptibles. Si un color está asociado con una forma natural, es fácil que el recuerdo se traslade al que tiene usualmente la forma asociada. El recuerdo de un color difícilmente encajable con estos estereotipos decae más fácilmente que aquellos que sí se adaptan. El recuerdo tiende a los colores modelo más cercanos. Ese es especialmente el caso en sensaciones de color que no agradan al observador.
No hay que confundir la memoria del color con el papel que desempeña el color en la memorización de objetos, formas y personas. Esa es otra función: la del color en la memorización.