Herramienta en forma de gráfico interactivo que tienen algunos programas de tratamiento o reproducción de imágenes para modificar las intensidades de los valores originales (entrada) dejando otros nuevos (salida). Su uso más habitual es para modificar los valores luminosos.
Esta modificación, a diferencia de otras (como los niveles, por ejemplo), se hacen aplicando funciones numéricas para que los valores cercanos a los modificados mantengan una proporcionalidad en su variación.

Esta modificación se hace usualmente dibujando y moviendo puntos unidos por una línea en un diagrama de tipo histograma entrada-salida como el que se ve arriba, en el que la secuencia de valores de entrada y salida dibujan una curva (de ahí su nombre).
Normalmente los valores de entrada se representan en el eje vertical y los de salida en el horizontal (aunque puede hacerse al revés). Los valores del mismo valor se encuentran van dibujando una línea diagonal de una esquina a otra, donde los valores iguales (si no hay modificación) se encuentran en la coordenada donde ambos son iguales (es decir: "10,10" o "50,50", "75,75" etc.). Los programas suelen añadir un histograma en el cuadro donde se ven las cantidades de píxeles de cada valor para ayudar a entender la composición de la imagen.

Así, por ejemplo, en unas curvas de luminosidad donde los valores no se modifican, el dibujo de correspondencia entre los valores de entrada y salida es una línea recta que va de esquina a esquina en 45º. Una imagen en la que las intensidades se oscurecen en los tonos medios, la curva adopta una forma de joroba, mientras que lo contrario (tonos medios aclarados), adopta la forma contraria, como se ve en las tres imágenes superiores. Como hemos indicado, los valores intermedios entre cualquier punto definido se calculan mediante interpolaciones matemáticas.
Una vez que se entiende la metáfora visual de tonos e intensidades que representa un diagrama de curvas, es muy intuitivo modificar las tonalidades resultantes en un material digital.
La herramienta de curvas se emplea también en RIP, perfiles de color y monitores para modificar el comportamiento no lineal de materiales o dispositivos.
En el tratamiento de color de imágenes con programas como Photoshop o Gimp, las curvas aplicadas a cada canal de una imagen son una herramienta clásica.