En artes gráficas, sinónimo de certificación de cumplimiento de un estándar establecido por un organismo al que se reconoce esa capacidad; por ejemplo, la ISO.
Así, una imprenta puede tener su sistema de trabajo homologado para declarar que éste se atiene y cumple la norma ISO 12647-2 para offset.
Esa homologación implica que alguien capacitado para ello ha comprobado el sistema, lo ha sometido a unas pruebas, ha medido los resultados comparándolos con uno o más estándares y, si los resultados no superan los márgenes de desviación permitidos, certifica que ese sistema cumple esos estándares.
En ese sentido, la homologación es un proceso, no sólo el resultado de dicho proceso.