Quemar
- En artes gráficas, exponer las planchas fotosensibles a la acción de la luz para su posterior procesado. Es un anglicismo.
- En fotografía, exponer en exceso, de forma que los detalles en las zonas más iluminadas desaparezcan.
Este es un pequeño glosario de artes gráficas y materias relacionadas con ellas (óptica, periodismo, tipografía, etc…). Además de un listado alfabético y de un formulario de búsqueda, se incluye un índice temático por áreas grupos de interés (PDF, Óptica, Tipografía, Preimpresión, etc…). En la medida de lo posible, se indica el equivalente en inglés, francés, italiano, alemán, catalán y portugués del término descrito.
Aviso: Este glosario está en una actualización interna importante. Durante algún tiempo algunos enlaces podrían no funcionar adecuadamente. Gracias por la paciencia.
Gustavo Sánchez Muñoz (Gusgsm), 2025
Sustancia transparente que se usa en algunas técnicas de dibujo para fijar y proteger la obra. Se usa especialmente con dibujos al carboncillo. No todos los fijadores son iguales y no todos son barnices, aunque se llamen así.
El número de veces que se produce un fenómeno repetitivo por una unidad de tiempo.
Al hablar de movimientos ondulatorios (como la propagación de la luz), su frecuencia es el número de ciclos de onda que se producen por segundo. Su unidad de medida es el hercio (1 hercio = 1 ciclo por segundo).
Como la velocidad de la luz es constante siempre que no se produzca un cambio de medio por el que viaja, la frecuencia de la luz depende de su longitud de onda: Longitudes de onda mayores tardan más ejecutar un sólo ciclo, por lo que su frecuencia es menor; es decir, la frecuencia es inversamente proporcional a la longitud de onda; cuanto mayor es la longitud, más baja es la frecuencia.
la frecuencia de cualquier emisión luminosa es la velocidad de la luz dividida por la longitud de onda. El valor se suele proporcionar en Terahercios y se expresa en ecuaciones con la letra griega ν (que se llama: "nu").
En tipografía, el símbolo "&", usado ya en época muy antigua por los copistas como notación abreviada de la conjunción latina et.
Se sigue usando en los distintos idiomas como equivalente de la conjunción copulativa "y", y como tal debe leerse
También se denomina "Y comercial" y "et".
Fuente tipográfica de palo seco o sin serifa de gran éxito y versatilidad creada por Adrian Frutiger a finales de los años cincuenta del siglo XX.